Trébede

martes, septiembre 04, 2007

VERANO DEL 93


Verano de 1993, pocas cosas interesantes por hacer para una chica de 17 años en un pueblo pequeño que a esa edad me ahogaba y aún era pronto para volar. No había muchas cosas por hacer, ir a la piscina y salir con los amigos al anochecer para recorrer las calles junto con los veraneantes que cada año regresaban. Los estudios iban bien y no había nada que recuperar o estudiar, así que me dedicaba al placer de no hacer nada, o casi nada.


Una mañana, una amiga me comentó que iban a dar un curso de "Fallas, trabajo en cartón yeso" yo nunca fui aficionada a nada manual porque mis dotes con las manos desde luego no eran para pintar o dibujar, pero al no tener otra opción mejor me apunté junto con un grupo de amigos. La idea era hacer una falla que el día de las fiestas del pueblo se quemaría en la plaza de toros; cada año era un ritual que se cumplía y se sigue haciendo. Antes se encargaba a un maestro fallero de valencia pero aquel año teníamos un monitor nacido aquí que se dedicaba a ese difícil arte de crear para después quemar. Nos apuntamos sin saber nada de nada y descubrimos todo un mundo lleno de magia para nosotros. En primer lugar tuvimos la oportunidad de conocer a Pedro y Maite, nuestros monitores, una pareja extraordinaria que cargada de paciencia y alegría nos enseñaba cada día. Conocimos también a un grupo de chicos y chicas que venían de todos los puntos de España para participar en un "campo de trabajo de verano" y a la vez ocupaban su tiempo ayudando y aprendiendo; lo que en un principio iba a ser un taller se convirtió en una pandilla de lo más extraña.


Pasamos juntos casi un mes, compartimos casi todo nuestro tiempo, desde la piscina, hasta las tardes en el taller y las noches de fiesta en los bares. Recuerdo aquellas primeras salidas nocturnas para mí, cargadas de alegría y de emociones que noche a noche descubría a mi alrededor, al fin y al cabo estaba dando un paso más y no me daba cuenta.


El trabajo que hicimos fue una maravilla gracias a las manos expertas de nuestros mentores. La experiencia fue de las mejores que he tenido y aún recuerdo con cariño a las chicas de Córdoba, a las monitoras de Valladolid que tenían locos a los chicos del pueblo. No olvidaré los consejos sentimentales que nos daba Josefina, la cocinera y tampoco podré olvidar a los "Joses" ese par de chicos, uno de León y otro de Oviedo que tanto y tan bien nos lo hicieron pasar.


Fue ese verano especial para recordar que todos tenemos o por lo menos que yo pasé y nunca olvidaré, cargado de descubrimientos de emociones y de diversión, no hay ni una sola foto en la que no salgamos riendo y es que era así como nos sentíamos, felices.


Me asalta hoy el verano del 93 porque ayer me encontré con Pedro, nuestro monitor al que no había visto desde entonces y el cariño brilló en nuestros ojos al saludarnos y recordar de nuevo aquellos días. Prometí visitar su taller y su museo de juguetes en ese pequeño pueblo de Avila donde vive y volver a modelar estrellas y lunas de cartón-falla tal y como nos enseñó hace tanto tiempo.

15 Comments:

Blogger Desesperada said...

los veranos del pasado, qué nostálgica, trébede. yo recuerdo uno especialmente, con 17 años, un amor de verano... en fin, qué te voy a contar, ja ja ja. bicos.

8:46 p. m.  
Blogger Fernando said...

Viva los recuerdos bonitos!!...besos.

12:36 a. m.  
Blogger J77 said...

Da gusto pensar en esos veranos que se pasan tan rápido y en tan buena compañia ¿no?

Bss.

7:52 a. m.  
Blogger Zebedeo said...

Da gusto encontrarse con alguien del pasado y sentir que todavia hay ese feeling, ese sentimiento de amistad además de los recuerdos compartidos.
No dejes de visitarlo a ese pequeño pueblo de Ávila algún día, es la mejor manera de no olvidar lo feliz que fuiste y de mantener la llama del recuerdo todavia ardiendo.

9:01 a. m.  
Blogger Meri said...

Wooo wooooo...hay veces que en medio de la rutina uno se encuentra con una nueva ilusión a la vuelta de la esquina y se convierte en el centro de su vida. Este precioso recuerdo es una muestra de que nunca hay que dejarse llevar por lo aparente o por la rutina. Probar cosas nuevas puede resultar la mas maravillosa de las experiencias.

Eyy, no dejes de visitar el taller de tu monitor y nunca pierdas la ilusión.

Besotes!!

9:50 a. m.  
Blogger Elena Casero said...

qué agradable es recordar esos veranos, lejanos o no tanto, que nos han dejado tanta huella.

Mi verano fue cuando yo tenía 11 ó 12 años.

10:45 a. m.  
Blogger Javier Romero said...

Yo en aquella época contaba con 12 años. Pasaba todos aquellos veranos en una casa con piscina y canasta de baloncesto... tardes enteras de baños y partidas. También empecé a aficionarme por los videojuegos en esos años.

Pero vamos, la noche aún me resultaba lejana. De todas formas, no la necesitaba.

Un beso.

12:56 p. m.  
Blogger Gubia said...

Pues si, teneis toda la razón es una bonito recuerdo para este final de verano.
Taller gigantea en Poyales del Hoyo, con un pequeño museo de juguetes.Incluso venden a traves de la web..si que lo visitaré, me apetece mucho.Gracias a todos.

1:44 p. m.  
Blogger Unknown said...

un buen verano para recordar...yo tb guardo recuerdos muy buenos de los veranos...Besos!

4:34 p. m.  
Blogger Orestes (Ex Al) said...

Me has hecho recordar el verano del 93 y la verdad es que no puedo precisar demasiado. Han pasado 14 años y yo ya estaba navegando, aunque en un carguero mas pequeño. Recuerdo que era un granelero, es decir de los que llevaban mercancia a granel, lo que es bastante mas pesado en las cargas y descargas que los contenedores que llevamos ahora. Hacia 5 años que habia finalizado la carrera de piloto, y ocupa un puesto con pocas responsabilidades ya que por encima de mi estaban el capitan, el piloto primero, es decir lo que llamamos el segundo de a bordo (lo que soy y ahora), y otros tres oficiales. En fin, que era el último mono. Haciamos mucho la ruta costera de españa y portugal con escalas en bilbao, santander, gijon, Coruña, Vigo, Oporto, Lisboa y Cadiz, pero desde alli virabamos para volver a bilbao. Ese verano en un viaje llevamos carga a Londres asi que tuve el placer de remontar el Tamesis y de conocer la capital inglesa. Me gustó mucho pasear por Hayde Park y pisar la hierba, como en mi pueblo e ir un dia al teatro musical para ver "cats".
Tenia la dirección y telefono de una española mas o menos de mi edad, que fue mi guia.
Asi fue, mas o menos, el verano del 93.
Un beso desde el Golfo de Aden, cuando estoy apunto de acostarme, pues perdi sueño por culpa del baloncesto pues vi el partido de españa por una cadena de television arabe.

12:22 a. m.  
Blogger Ana said...

En el 93... descubrí la costa brava y una Barcelona preciosa. Qué bonito encontrar a alguien que te haga recordar. Un beso, y sigue haciendo estrellas.

1:31 p. m.  
Anonymous Anónimo said...

Hola, soy nuevo en esto...
Me gusta recordar a mi también aquellos años, y mi pasado en general, del que siempre hay algo que aprender...recordar lo malo y lo bueno. Lo primero para no repetirlo, y lo segundo para volver a alcanzarlo. Nuestra niñez nos recuerda lo fácil que resulta ser felices con tampoco.
¿Por qué nos complicamos tanto al crecer?
He visto pocas personas en las que verdaderamente los años hayan supuesto un crecimiento y enriquecimiento real como persona. Me dá que tú eres una de ellas.
¡¡¡Un saludo desde tierras lejanas!!!

2:37 a. m.  
Blogger Eryx Bronte said...

No está mal reservar un poco de tiempo a los recuerdos. Abrazos.

11:09 p. m.  
Blogger Javier López Clemente said...

He consultado el albun de fotos para ver que ocurrió en el verano del 93. Al parece sólo fuimos de boda en boda y tiro porque me toca
:-)

Salu2 córneos.

11:21 a. m.  
Anonymous Anónimo said...

Mira tú por donde, amiga Gubia, he dado contigo en este blog. Sospecho que tu seudónimo tiene que ver con tu profesión... ¿sabes quién soy? Pedro, de Gigantea. Yo también recuerdo con cariño aquél cursillo y a tod@s vosotr@s. Si echas un vistazo a la pagina de nuestro pueblo en Pueblos de España verás apareces por ahí... Besotes.

10:43 p. m.  

Publicar un comentario

<< Home