Trébede

jueves, abril 26, 2007

SMS


Recibo un mensaje, un sms cargado de nubes tan grises como el cielo de hoy. Es de una amiga, nos vemos de tarde en tarde, en alguna ocasión pasan dos años a pesar de vivir a treinta kilómetros. Cada una tiene su vida y hablamos de vez en cuando por teléfono para ponernos al día, pero nunca dejamos que nuestra amistad se pierda.

Nos conocimos en el instituto y desde entonces y a partir de todo lo vivido en aquellos años de juventud, juerga, estudios y todo lo que envuelve ese tiempo, nos hemos acordado siempre la una de la otra a pesar de no ser ese tipo de "amigas intimas" de diario. Lo pienso y a veces este tipo de amistad es más cercano y más auténtico o tal vez, se gasta menos por el uso.

La noticia vía sms y la posterior llamada de teléfono era para informarme de una separación, de un punto y final a una relación que duraba más de doce años y de la que mi amiga ha salido bastante tocada. A veces las personas nos enganchamos a otras como si fuesen una droga; sabemos el mal que nos hacen pero no lo vemos, pensamos que podremos cambiar algo aunque de antemano sabemos que no será así, simplemente nos engañamos a nosotros mismos y nos cegamos ante la evidencia.En fin, que se fueron al traste la vida en común, las ilusiones y todo lo que rodeaba su vida. Me gusta pensar que todos tenemos que caer en el camino y golpearnos y que solo así aprenderemos a vivir a pesar de las advertencias para encontrar un camino mejor, más llano sin tantos baches.
Ahora me cuenta que hay un nuevo proyecto de trabajo lejos de aquí y un corazón que como un rompecabezas habrá que volver a recomponer pieza a pieza.
Hablamos y lo único que pude hacer es dar ánimos y desear que todo vuelva a la normalidad y esperar que la herida cure pronto.

Este fin de semana hemos quedado para tomar algo y hablar; hace dos años que no nos vemos aunque hablamos alguna vez y la verdad es que no sé muy bien qué decir ni qué hacer, supongo que en ese momento me iré acomodando a la situación y todo volverá a surgir como cuando eramos un par de crías de instituto.

En una estantería de mi dormitorio tengo una foto de nuestro grupo de entonces, cada día la veo y no me doy cuenta del tiempo que ha pasado; solo en días como hoy soy consciente de que vamos caminando por distintos senderos que de vez en cuando y afortunadamente se cruzan...

miércoles, abril 25, 2007

EN LA PLAYA


Me acabo de dar cuenta de que no hace mucho tiempo escribí un deseo, un sueño que me rondaba por aquel entonces por mi cabeza. Deseaba encontrarme en una playa del norte, tener el mar frente a mí y que la brisa acariciase mi cara; deseaba también recibir el beso y el abrazo de alguien cercano y cariñoso que me quisiera de verdad, deseaba todo eso y ahora me doy cuenta de que lo he vivido hace unos días.


Si, lo he vivido y ahora soy consciente de ello, en aquel momento no me dí cuenta, simplemente me abandoné, disfruté de esos segundos frente al mar, cerré los ojos al atardecer en aquella playa y recibí un beso de Valen,  en los labios y un abrazo que me hicieron estremecer. Tal vez, ese beso y esa sensación querían hacerme consciente de lo que pasaba. Avisaban a mi cerebro para que procesara lo que estaba viviendo, pero en ese momento me abandoné al sentimiento y me dejé llevar por ese instante.


Ahora, después de unos días, me pongo a recordar a ordenar todo lo que fue pasando y me doy cuenta de que pasó algo importante. Viví ese sueño que en voz alta deseé tantas veces y a pesar de mi despiste no voy a olvidarlo; escribirlo aquí bastará para recordarlo y cuando cierre los ojos y abrace a Valen al anochecer volveré a la playa, a estar frente al mar al atardecer y volveré también a sentir sus labios y el abrazo que la brisa me sigue regalando.

lunes, abril 16, 2007

CON BUEN SABOR

Han pasado los días de relax, para aquellos que pudieron disfrutar de ellos, porque yo como siempre tenía fiesta un día y trabajo al siguiente con lo que no me pude mover de aquí, así que este fin de semana si todo va bien, cambiaré por fin de aires.

Bueno, que como iba diciendo pasaron los días vacacionales de Semana Santa y ahora con un poco de tiempo de por medio voy haciendo balance. Al principio la semana se presentaba más bien sosa y sin muchos alicientes pero la noticia de que mi prima valenciana y su novio se pasaran por aquí hizo que todo cambiara. La verdad es que me encantó tenerla aquí de nuevo y recordar los días de verano cuando aún eramos unas crías y estábamos juntas todo el tiempo que podíamos, que era mucho por no decir casi todo. Me gusta sentir que a pesar del paso del tiempo y de que las vida nos ha cambiado a las dos, seguimos en contacto y aunque nos veamos poco estamos pendientes de todo lo que a nuestro alrededor va pasando.

Llegaron también los amigos que están viviendo lejos de aquí y en estas fechas vuelven a pasar estos días. La casa de Valen se llenó de gente de repente, tuvimos alguna cena tranquila, alguna comida con amigos, la visita de mis primos y hasta el piso de Valen sirvió de "refugio" para una pareja de amigos que necesitaba cobijo en una noche de frío,jajaja. Hubo ratos de risas, enseñamos el juego de las "chapas" a todos los visitantes que por cierto se quedaron asustados del vicio al juego que hay en esta tierra. Una excursión en la montaña acompañada de una buena comida al calor de una vieja casa de piedra y algún que otro momento de copas y juerguecita.
En fin, que visto el resultado estoy más que contenta de todo lo que he pasado en estos días acompañada de amigos y familia.